¿Cuál es la finalidad del ecumenismo? Por: JM López Vega
El ecumenismo es un concepto que actualmente se utiliza con un significado distinto al original. Se han roto y extendido los límites de su significado. Pero, como es usual, esta distorsión no se emplea para enriquecer su significado, sino para justificar posturas contrarias al dogma católico. Algunas de ellas, verdaderas herejías.
· ¿Qué es el ecumenismo?
En su acepción etimológica se refiere a algo que afecta a todas las personas del mundo, a todos los países y a todos los tiempos. Es decir, universal.
Pero en su significado católico propio, denota a un acercamiento de la iglesia a otras religiones cristianas con el fin de regresarlas a la verdad, que solo se encuentra en Cristo, y en su Iglesia
"El ecumenismo es la tendencia o movimiento que busca la instauración de la unidad de los cristianos, es decir, la unidad de las distintas confesiones religiosas cristianas «históricas», separadas desde los grandes cismas..."[1]
Este movimiento ecuménico en la Iglesia Católica tuvo como finalidad original atraer a las otras religiones cristianas a la Iglesia fundada por Cristo.
Ecumenismo no es equivalente a negociar, ni dialogar, ni siquiera a compartir, sino a presentar la verdad enseñada por Nuestro Señor Jesucristo y custodiada y transmitida por la Iglesia, con el fin de que los demás grupos cristianos vuelvan al catolicismo.
Resulta lógico que si alguien es depositario de una verdad, no la puede negociar por falsedades. La verdad de Cristo predomina sobre los respetos e intereses humanos. No por quedar bien con los "hermanos separados" hemos de falsificar el dogma encomendado a la Iglesia.
Dice el Dr. Manuel Ocampo Ponce[2]:
Por eso es fundamental comprender que la pluralidad no tiene sentido sin la unidad de la verdad. Sin unidad, la pluralidad se disuelve en la nada. De modo que hablar de la unidad en la verdad es hablar de ecumenismo verdadero como participación de la verdad ontológica que, en su dimensión trascendente y sobrenatural, se encarna en Jesucristo Dios y hombre verdadero.
¿Qué nos dice Manuel Ocampo con estas palabras?
Que la diversidad de creencias cristianas no tiene sentido sino es en Cristo, Dios y Hombre verdadero. Que debemos regresar a las verdades fundadas en las Sagradas Escrituras y la Tradición, dadas en custodia a la Iglesia Católica Sin unidad doctrinal, la pluralidad se disuelve en nada. Es decir, si las demás iglesias cristianas permanecen en sus errores, no tiene sentido ningún esfuerzo ecuménico.
"De aquí que el falso ecumenismo se caracterice por la negación de la Verdad. Su esencia es el intento de llegar a un acuerdo a partir de verdades y opiniones parciales que no tienen referencia a la Verdad objetiva y única. Por todo eso es muy importante resaltar que sin verdad objetiva no hay diálogo ni hay ecumenismo, sino infinidad de conflictos."
Lo que supone esta excelente cita es que el falso ecumenismo consistiría en reunir grupos cristianos o de otras religiones, pero sin una referencia a la Verdad objetiva y única, a Cristo. Es decir, tratar de integrar al catolicismo con diversas religiones, para que cada una de ellas continúe en sus errores, ni es ecumenismo, ni es recomendable para los católicos, pues corren el riesgo de desviarse en la fe. Y eso es justo lo que estamos viviendo, un falso ecumenismo.
El resultado del esfuerzo por atraer a los protestantes, poco o nada se ha logrado. Por el contrario, es la Iglesia Católica la que se ha contaminado de protestantismo. Hay demasiadas evidencias de ello, sobre todo a partir del Vaticano II. Como ejemplo actual, solo hay que ver el Camino Sinodal Alemán.
2. ¿Cuál es el alcance del ecumenismo actual?
- Ya mencionamos que el ecumenismo original tenía como fin atraer a las religiones cristianas a la verdadera Iglesia de Cristo. Y hemos visto las dificultades de esta tarea, pues es difícil que dejen sus errores. Más allá de la razón y la fe, existen intereses humanos que les impiden la conversión
- El problema es que ecumenismo se ha ampliado a otros niveles que no le competen. En una segunda interpretación incluye a las religiones abrahámicas, es decir, las que tienen sus raíces en Abraham, que son, además del catolicismo, el judaísmo y el islamismo. Parten del supuesto que Dios es el mismo en las tres religiones, lo cual es falso.
- En una tercera extensión se quiere incorporar a todas las religiones, formales y no formales (como los cultos animistas, la Pachamama y otros) en un modelo ecumenista, aunque tengan otros dioses y creencias contrarias a la cristiana, como si todas fueran verdaderas y salvíficas.
Si atendemos a la finalidad del verdadero ecumenismo, tenemos que aceptar que la iglesia vaticana está muy lejos de su fin original, que es acercar a los demás cristianos a la Iglesia Católica. Si se renuncia a esa finalidad, se incurre en un error y un engaño. Así sucede con estos movimientos ecuménicos oficiales. No sólo no combaten el error, sino que lo toleran y hasta lo promueven. Se trata de un falso ecumenismo. De hecho, en una gran herejía, compuesta de varias herejías particulares; por ejemplo, admitir un origen divino de las demás religiones, aceptar que la salvación se encuentra en cualquier religión, rendir culto y adoración a falsas deidades en las iglesias católicas, etc.
Decir que las religiones abrahámicas tienen al mismo Dios, es falso. Si bien las tres religiones pueden encontrar raíces en la Sagrada Biblia, el Dios que veneran no es el mismo. Los judíos no aceptan al Mesías, a Jesucristo, que vino a redimir al mundo, en una segunda creación, dejando la ley de Moisés obsoleta, o al menos superada.
Los islamitas-musulmanes no reconocen a Cristo como el Hijo de Dios, y menos admiten el dogma de la Santísima Trinidad, que es la esencia del cristianismo. El cardenal Shneider[3] hace un análisis puntual e este tema. (Ver NV 172)
El peor escenario es aceptar que todas las religiones son verdaderas y "son queridas por Dios"[4]. Esto es lo que dice Francisco en el "Documento sobre la fraternidad humana para la paz mundial y vivir juntos" durante la reunión de Abu Dabi, en febrero de 2019.
No es posible. La única religión fundada por Dios es la cristiana. Y las palabras de Cristo confirman su necesidad para ser salvos: "El que creyere y se bautizare, se salvará: pero el que no creyere, será condenado." (Mr. 16,16)
Decir que en todas las religiones hay salvación es un engaño, y una responsabilidad grandísima para quien lo predica, pues tendrá en su consciencia todas las almas que se pierden por no conocer la verdad.
3. Diferencias entre ecumenismo y diálogo interreligioso.
Tiene diferencias importantes tanto en el fin como en el proceso. El fin del verdadero ecumenismo está relacionado con la evangelización, con la necesidad de comunicar el Evangelio, en su sentido.
más puro, al resto de los cristianos, a fin de que conozcan sus errores y se conviertan. Pero hay una base común: Cristo.
El propósito del "diálogo interreligioso" es buscar la cooperación de diferentes religiones en un mismo propósito. Si bien este propósito puede ser religioso, también puede serlo de carácter social, o político. Por ejemplo, buscar la paz o disminuir la pobreza.
El problema del diálogo es que generalmente implica una negociación en la que ambas partes deben ceder en algún punto para llegar a un acuerdo benéfico para ambos. Pero en cuestión de dogma no se puede negociar, porque son verdades eternas y universales, que identifican a una religión. Ceder en una sola cuestión dogmática, o es herejía o es cisma.
El problema actual es que al entender al ecumenismo como un consenso entre religiones de cualquier tipo, se tiene la idea de que es necesario el diálogo para llegar a puntos de acuerdo. Esto es imposible, porque, como se estableció al inicio, la única forma de alcanzar la unidad es poner a Cristo y su Iglesia Católica en el centro. Por eso dice el Dr. Ocampo: "...sin verdad objetiva [Cristo y su doctrina] no hay diálogo ni hay ecumenismo, sino infinidad de conflictos.
La idea de Bergoglio de alcanzar una iglesia universal, sincrética, está destinada al fracaso, porque constituye una violación al Primer Mandamiento de la Ley de Dios, es idolatría, además de la necesaria resistencia de los verdaderos católicos que quieren conservar defender su fe. Pero también está la resistencia de los seguidores de otras religiones, que no aceptan el cristianismo y que no van a convertirse sin la evangelización y la gracia que regala Dios. Porque nadie ama lo que no conoce. Y para amar a Cristo, es necesario primero conocerlo.
4. El ecumenismo es un medio, no un fin.
El verdadero ecumenismo es una estrategia para acercar a los cristianos no católicos (básicamente protestantes y ortodoxos) a la Iglesia. El fin de esta estrategia no es tener un mayor número de adeptos o seguidores -como lo buscaría un partido político o un bloguero en la Internet- sino el ayudar a todas las personas a que alcancen la salvación. Ese es el mandato de Nuestro Maestro: "Id por todo el mundo: predicad el Evangelio a todas las criaturas" (Mr. 16. 15). Esto es necesario para que crean, se bauticen y estén en condiciones de alcanzar la salvación eterna.
Pero Francisco [5]lo ve desde otra perspectiva,
totalmente humana, alejada del fin último del hombre. "en otros tiempos nos excomulgábamos recíprocamente. Ahora nos llamamos
hermanos, gracias a Dios".
De acuerdo. Pero
eso no implica que trabajemos y alcancemos la felicidad eterna. Solo dice que
sería posible tener una vida socialmente más armoniosa (que sería más bien
aparente) porque sin la gracia de Dios, el Único Verdadero, nada es posible y
menos duradero.
Conclusión:
Podemos decir, sin temor a equivocarnos, que la iglesia vaticana ha extraviado los verdaderos propósitos ecuménicos. Cuando deberíamos estar trabajando por la conversión de los hermanos cristianos separados, por atraerlos de nuevo al redil de Nuestro Señor, los jerarcas de la iglesia andan coqueteando con cuantas religiones aparezcan en el horizonte; y en lugar de trabajar en la evangelización y conversión de los paganos, se les reconoce como religiones legítimas y "queridas por Dios" y hasta se les alaba por sus enseñanzas.
Esta relación de la iglesia vaticana con otros cultos es un escándalo que confunde y desalienta a los católicos, que empiezan a dudar de su fe. Además de que es un engaño, pues desalienta las conversiones y hace que los no católicos reafirmen sus creencias. Malo. Muy malo.
[1] Wikipedia. Ecumenismo. En: https://es.wikipedia.org/wiki/Ecumenismo
[2] Manuel Ocampo Ponce. 29 de octubre de 2016.
INFOCATÓLICA. El verdadero ecumenismo. En: https://www.infocatolica.com/blog/concordia.php/1610290525-el-verdadero-ecumenismo
[3] CORRISPONDENZA ROMANA. 12de junio de 2020. Obispo Schneider: católicos y musulmanes no comparten una fe común en Dios, ni una adoración común. En: https://www.corrispondenzaromana.it/international-news/bishop-schneider-catholics-and-muslims-share-no-common-faith-in-god-no-common-adoration/
[4] Elena Magariños. 11 de febrero de 2019. VIDA NUEVA DIGITAL. El obispo Schneider corrige al Papa. "El cristianismo es la única religión querida por Dios". En: https://www.vidanuevadigital.com/2019/02/11/el-obispo-schneider-corrige-al-papa-el-cristianismo-es-la-unica-religion-querida-por-dios/
[5] Blanca Ruiz. 28 de abril de 2022. ACIPRENSA. Papa Francisco: El ecumenismo "no es algo opcional, sino una actitud esencial" en la Iglesia. En: https://www.aciprensa.com/noticias/papa-francisco-el-ecumenismo-no-es-algo-opcional-sino-una-actitud-esencial-en-la-iglesia-91897