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03.07.2024

MODIFICARÁ EL MANUAL DE BUENAS PRÁCTICAS DE LA EUTANASIA. El gobierno español añadirá la enfermedad mental a las causas para solicitar la eutanasia. INFOCATÓLICA. 13jun24. https://www.infocatolica.com/?t=noticia&cod=49692

Noticia:

El Ministerio de Sanidad del gobierno español va a modificar el Manual de Buenas Prácticas de la Eutanasia para incluir la enfermedad mental como causa que permita solicitar el suicidio asistido. España seguirá así el camino marcado por la mayor parte de los países que han legalizado esa práctica ignominiosa y perversa.

(Diario Médico/InfoCatólica) El XXII Congreso Derecho y Salud, celebrado la semana pasada en Alicante, ha sido un foro crucial para debatir sobre la Ley Orgánica de Regulación de la Eutanasia (LORE) y sus posibles nuevas aplicaciones, incluyendo las enfermedades mentales como causa para solicitar esta práctica.

El borrador señala en su introducción que la LORE «no excluye la enfermedad mental, permitiendo que las personas con un padecimiento insoportable debido a la presencia de una enfermedad mental puedan solicitar la PAM (prestación de ayuda a morir) en igualdad de condiciones que aquellas cuyo sufrimiento proviene de una enfermedad somática».

Serafín Romero, presidente de la Comisión de Garantía y Evaluación de Andalucía, señaló que «la consideración de los trastornos mentales graves e incurables como causas para la eutanasia requiere un enfoque muy cuidadoso». Romero destacó la necesidad de garantizar que los pacientes con enfermedades mentales reciban una evaluación exhaustiva y un acceso completo a todas las opciones de tratamiento antes de considerar la eutanasia como una alternativa. «Es esencial que los profesionales de la salud mental participen activamente en el proceso de evaluación para asegurar que las decisiones se tomen con el mayor rigor y respeto por la vida del paciente», subrayó.

Por su parte, Albert Tuca Rodríguez, presidente de la Comisión de Garantía y Evaluación de Cataluña, enfatizó la complejidad de evaluar el sufrimiento psíquico comparado con el físico. «El sufrimiento mental puede ser igualmente insoportable y devastador», dijo Tuca Rodríguez, «pero la subjetividad de este dolor plantea desafíos únicos para los evaluadores». A su juicio, la inclusión de enfermedades mentales en la LORE requeriría no solo un consenso ético sino también un desarrollo de protocolos detallados y precisos que garanticen que estas decisiones se tomen con la máxima seriedad.

Un aspecto que se destacó repetidamente fue la necesidad de formación específica para los profesionales sanitarios en el manejo de solicitudes de eutanasia por causas mentales. Matilde Vera, letrada de la Asesoría Jurídica del Servicio Andaluz de Salud indicó que «la falta de formación adecuada en salud mental puede llevar a errores graves en la evaluación y gestión de estas solicitudes». Se sugirió la creación de programas de capacitación especializados y la actualización de los profesionales en las últimas investigaciones y métodos de tratamiento en psiquiatría.

Asimismo, los ponentes abordaron los desafíos logísticos y burocráticos en la implementación de la eutanasia para pacientes con enfermedades mentales. La dilación en los tiempos de procesamiento de las solicitudes y la objeción de conciencia por parte de los profesionales fueron señalados como obstáculos que deben ser resueltos para asegurar un acceso equitativo y rápido a la eutanasia.

COMENTARIOS 


¿Hay buenas prácticas para la aplicación de la eutanasia y el suicidio asistido? Este es el obstáculo inicial que debemos considerar. En primer lugar, dar la muerte a una persona o ayudarle a morir implica una violación a la ley natural, a los principios morales que Dios ha puesto en la conciencia de todos los hombres: No matarás. Y el no matar no sólo se refiere al otro, sino también a sí mismo.

En realidad, se trata de un rechazo absoluto a la soberanía absoluta de Dios sobre la vida y la muerte. Así lo dice el Libro de la Sabiduría: Pues Tú eres, ¡oh Señor!, el dueño de la vida y de la muerte, y Tú nos conduces hasta las puertas de la muerte, y nos haces volver atrás desde ellas. Un hombre bien puede matar a otro por malicia; pero salido que haya el espíritu, no puede hacerle volver, ni hará tornar el alma de allí donde ha sido recibida. (Sb. 16, 13-14)

La fatalidad de una decisión de causar la muerte, por cualquier razón, es que ya no se puede regresar a la condición anterior al suceso. Hay cosas que podemos remediar, por ejemplo, robar, podemos luego restituir; o causar una injuria: podemos luego pedir perdón. Pero quitar la vida a una persona no tiene un modo de regreso. Por eso es que, el que mata, sea a una persona diferente, o a sí mismo, ya no puede remediar el hecho. Y en el pecado se incluye no solo al que mata, sino también a los cómplices. En el caso de la Eutanasia o el suicidio asistido, participan del pecado no sólo el que toma la decisión de aplicar la muerte -que no siempre es el enfermo, sobre todo si está incapacitado para hacerlo- sino también a los jueces que la dictan, a los médicos y auxiliares sanitarios que la aplican, y también a los familiares que la consienten.

Si este tema es complicado, considerando el sufrimiento del enfermo, aún más se obscurece cuando se trata de enfermedades psicológicas. En las decisiones sobre este campo existe un buen porcentaje de subjetividad. Las principales razones son el hecho de que los procesos conscientes de una persona no se pueden diagnosticar con la misma facilidad que los problemas orgánicos, corporales, y la segunda es que los estados de consciencia no son estables, sino que están un flujo continuo que aumenta o disminuye. Así que tomar una decisión fatal, podría deberse no a una alteración psicológica grave, sino a una interpretación de quien hace el diagnóstico, o a un estado depresivo o psicótico que puede ser transitorio. Entonces, lo que parecería ser un "acto de caridad", se convierte en un asesinato.

Pero hay más. Falta considerar los factores sociopolíticos. Frecuentemente se tacha de rígidos, hipócritas o hasta enfermos mentales a los que se oponen al pensamiento único dictado por el globalismo -entendido como ideología-, el llamado Gobierno Mundial. ¿Qué pasaría si decide considerar a los opositores como enfermos mentales, como ya se ha hecho con el congelamiento de sus cuentas bancarias[1]? ¿Y si se toma la decisión por razones económicas, como ya se ha previsto, dado que la carga económica de los ancianos es altísima para la sociedad[2]?

Pero también se ha olvidado el sentido cristiano del sufrimiento. Por una parte, la vida, toda, está llena de alegrías y sufrimientos; pero tanto los primeros, pero especialmente los segundos, son una oportunidad de hacer penitencia por nuestros errores y faltas pasadas. Además, los sufrimientos se convierten en una ofrenda a Dios en señal de penitencia, y con ellos nos podemos unir a los sufrimientos de nuestro Redentor en su Pasión. Así vistos, son una oportunidad de "pagar" por nuestros pecados en esta tierra, para no tener que pagarlos, al menos no completamente, en la vida futura.


[1] Pro Memoria. 06 de febrero de 2024. ¿No estás de acuerdo? Bloqueo tu cuenta. Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Canadá: la nueva dictadura. STILUM CURIAE. https://www.marcotosatti.com/2024/02/06/dissenti-blocco-il-tuo-conto-usa-francia-gran-bretagna-canada-la-nuova-dittatura/

[2] Esteban, C. 22 de abril de 2024. La eutanasia como método de ahorro en Sanidad y pensiones. INFOVATICANA. https://infovaticana.com/2024/04/22/la-eutanasia-como-metodo-de-ahorro-en-sanidad-y-pensiones/ 


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