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CANADIENSES PRO FAMILIA LUCHAN POR SALVAR SU NACIÓN. La Marcha del Millón de Personas de Canadá contra el adoctrinamiento LGBT ha «cuadriplicado» su apoyo desde el año pasado. INFOCATÓLICA. 24ago24. https://www.infocatolica.com/?t=noticia&cod=50242 

Resumen:

El activista pro-familia Kamel El-Cheikh ha revelado que el movimiento Hands Off Our Kids, conocido por su oposición al adoctrinamiento LGBT en las escuelas, ha experimentado un crecimiento masivo en apoyo y personal, preparando el terreno para una Marcha del Millón de Personas aún más impactante este otoño.

Se prevé que la Marcha del Millón de Personas por la Infancia de Canadá de este otoño sea aún mayor que la del año pasado, en la que más de un millón de canadienses se manifestaron por los derechos de los padres.

«Canadienses de costa a costa se acercaban al movimiento y decían: 'Formé parte de la marcha del millón de personas del año pasado, no participé en el trabajo con vosotros directamente, pero intentamos ayudar y llenar ese vacío, e hicimos un gran trabajo. Tuvimos una participación masiva... », dijo El-Cheikh, que organizó la marcha de costa a costa por los derechos de los padres el pasado septiembre.

«Y estos son canadienses cristianos», añadió. «Se trata de Primeras Naciones. Son Sikhs. Estos son musulmanes».

El-Cheikh reveló además que el movimiento ha «cuadruplicado el tamaño» que tenía en septiembre de 2023, tanto en simpatizantes como en personal. El grupo tiene ahora responsables en Columbia Británica, Alberta, Saskatchewan, Nuevo Brunswick, Ontario y Quebec. «Somos un 75% más grandes que el año pasado en términos de personal y de personas», declaró El-Cheikh. «Ahora tenemos representantes de las Primeras Naciones, jefes que representan a 100.000 personas que están en nuestro movimiento», añadió.

El grupo también colabora estrechamente con otros grupos pro familia, como Campaign Life Coalition, Mama Bears, Veterans for Freedom y, recientemente, Canadians for Truth.

El-Cheikh explicó que los canadienses pro familia luchan por declarar tres cosas: que somos «una nación, una bandera», que «los padres de Canadá serán los padres de los niños de Canadá» y que «no permitiremos que se politice a nuestros hijos».

Ahora, El-Cheikh está trabajando con su equipo para organizar la segunda Marcha del Millón de Personas por la Infancia, prevista para el 20 de septiembre en ciudades de todo Canadá. Más información sobre las marchas en el sitio web Hands Off Our Kids.

El-Cheikh pidió a los canadienses que asistieran a la manifestación que llevaran la bandera canadiense y vistieran los colores nacionales del país, rojo y blanco. «Y vengan a celebrarlo con nosotros todo el día», añadió El-Cheikh. «Esto es una marcha. Es un acontecimiento monumental. Es un festival. Es celebrar a los canadienses y la diversidad de los canadienses».

Esta será la segunda gran protesta del año del movimiento pro-familia. Como LifeSiteNews informó anteriormente, en junio, los maestros y el personal de una escuela primaria en Ottawa, Ontario, estaban desconcertados cuando 591 de 738 estudiantes (80 por ciento) faltaron a la ceremonia de izamiento de la bandera del «orgullo» LGBT de la escuela.

Además del éxito masivo en la escuela de Ottawa, El-Cheikh estimó un índice de boicot a la bandera del «orgullo» del 50% en las escuelas de todo el país durante el 2º Día Nacional Anual de Abanderamiento del «Orgullo» de Canadá.

Según Campaign Life Coalition, este año participaron en la campaña un total de ocho provincias, frente a las siete del año anterior.

COMENTARIOS 

Es muy importante lo que estos grupos están haciendo. Cuando los representantes "populares" se niegan a defender los derechos y las iniciativas de sus representados, entonces es necesario que las personas se organicen para hacer valer sus derechos.

Canadá tiene uno de los gobiernos más anticristianos y en general, más antirreligiosos. Han sido de los primeros en aceptar el aborto, la ideología de género, la eutanasia y todos los demás temas que responden a la agenda globalista, de la que Justin Trudeau, su Primer Ministro, es un importante promotor, pues lo vemos aparecer en todas las reuniones que tienen como fin imponer esta nefasto y anticristiano grupo, que sustenta la Agenda 2030, pero no exclusivamente. La Agenda 2030 es solo la careta que presentan ante las naciones, pero el trasfondo incluye la instauración de un Gobierno Mundial y descristianización de lo que en una época fue la civilización cristiana occidental. Especialmente quieren aniquilar la religión católica, porque saben que en ella se encuentran las verdades necesarias para la salvación.

Sin embargo, el cuidado y la defensa de los hijos es algo que interesa no solo a los católicos, sino también a las demás religiones y a todo ciudadano que tenga un poco de sentido común.

Como podemos observar el movimiento "Hands Off Our Kids" (Manos fuera de nuestros niños) es el principal organizador, al que se le han unido ya otras organizaciones que también luchan por la vida y la familia. Ya el año pasado reunieron más de un millón de canadienses que se manifestaron en contra de los movimientos relacionados con las ideologías de género. Pero ahora, este próximo 8 de septiembre, se esperan muchos más participantes. Así será, pues la conciencia de las familias se ve cada vez más oprimida por el gobierno que debería representarlos, y en lugar de ello, solo promueven la muerte a través del aborto y la eutanasia, así como la perversión sexual, y moral en general.

Según lo explicó el líder de la citada organización, sus objetivos pueden sintetizarse en estos tres puntos:

• Que somos «una nación, una bandera», no parte de un gobierno mundial globalista, que no acepta la autonomía de las naciones, que quiere apoderarse no sólo de las riquezas de los pueblos, sino también de las conciencias de sus habitantes.
• Que «los padres de Canadá serán los padres de los niños de Canadá». Con todo derecho. Los padres tienen la obligación y responsabilidad de elegir los medios adecuados para educar a sus hijos; el gobierno debería de apoyarlos reconociendo sus derechos y brindando los medios necesarios para que esta tarea se lleve a cabo. Pero en lugar de ello, intentan imponer un modo de vida que conviene a los globalistas, a la élite que quiere imponer la nefasta Agenda 2030.
• Que «no permitiremos que se politice a nuestros hijos». Excelente propósito. Si alguien debe dirigir el pensamiento de los hijos son los padres de familia, pues tendrán que responder ante Dios por ello. Por lo mismo, son los valores familiares y religiosos los que deben prevalecer en toda la tarea educativa y no envenenar a los niños con la ideología de género y las demás corrientes relacionadas con la cultura de la muerte.

Resulta muy ilustrativo el ejemplo que citan en el que, en junio pasado, los maestros y el personal de una escuela primaria en Ottawa, Ontario, estaban desconcertados cuando 591 de 738 estudiantes (80 por ciento) faltaron a la ceremonia de izamiento de la bandera del «orgullo» LGBT de la escuela. Bien hecho. Por lo mismo pedimos a Dios que permita que esta marcha se lleve a cabo con todo el éxito; que reúnan no un millón, sino al menos medio millón más, y que ese día marchen juntos padres e hijos, aunque deban faltar a la escuela.

Un buen ejemplo para los demás países, incluyendo el nuestro.